Fotografía de Don McCullin - ‘Snowy, Cambridge, early 1970s’

jueves, 27 de septiembre de 2007

La vida secreta de las palabras

Una mujer en el límite del máximo dolor y en una casi completa incomunicación. Una de las películas más bellamente desgarradoras que recuerdo haber visto.

Me acordé de ella rebuscando en la memoria la imagen de algún digno friki en el cine.




También recordé que, como un pequeño respiro, agradecí el breve juego de incomunicación en un columpio.



Coixet, genial rara avis.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Adoro esta peli, la adoro! Emocionalmente es desgarradora; cinematográficamente es divina. Hay dos escenas que me dejaron el corazón chorreando:
a) Cuando el prota le dice a la chica: "Humm, ya empiezas a mentirme. Eso es que te gusto un poco". Olé.
b) Cuando los dos hombres -compañeros de trabajo en esa solitaria plataforma petrolífera- se abrazan y se besan con tanta dulzura. Chapeau.
Coixet, rara y bella avis.

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Amigo Miguel (me gusta más llamarle Miguel, qué le voy a hacer). Que tenga una preciosa luna en su casa con su familia. Un beso de buenas noches.

Anónimo dijo...

Vale, esta es la peli de la Coixet que nunca veo, no sé por qué. En primavera (creo) hicieron un ciclo de su cine en Alcobendas y fue la única que no pude ver. Cosas del destino digo yo.
Ahora como Leonor Watling en "Mi vida sin mí"... (deretimiento repentino, perdonen las molestias)

Lenny Zelig dijo...

Ah, la luna, Aviadora (no le tengo otro nombre), la vi esta mañana desde el coche mientras llevaba a los peques al cole. Como para haberse parado un momento a pensar en esferas colgando. Pero luego suena el timbre y se hace tarde.

La verdad es que me cuesta decir cosas de las películas que me gustan. Me quedo con las sensaciones, imágenes y sonidos, pero luego me da pereza verbalizarlo. Con "La vida..." me quedo con todo.

Bianca también me mintió, pero no porque empezara a gustarle. Más bien empezó a decirme la verdad cuando me fue tomando cariño. Al revés.

Daniel, no desaproveche la próxima oportunidad que tenga de verla. Aunque es desaconsejable recomendar excesivamente algo. Cuando más he disfrutado en el cine ha sido cuando menos esperaba.

my blue eye dijo...

Pues mire que a mí Coixet no me convence... No ya "Mi vida sin mí", que me disgustó horrores y a la que simplemente creo que no entiendo (pensaba que el amante era un personaje soñado, pero alguien me desmontó la teoría), sino "La vida secreta de las palabras", que me dejó llena de dudas. Lo más terrible es que esas dudas se disiparon en el olvido y ahora ni siquiera puedo decirlas.

Lenny Zelig dijo...

Me gusta su franco contrapunto. Es lo que tiene el cine íntimo y personal. Su relación con los espectadores es también personal, caprichosa e imprevisible. Aquellos personajes deshechos en desigual medida despertaron mi compasión y mi interés. Tal vez influyó el momento en el que la vi. Siempre pienso que ese detalle importa porque a veces sólo tengo ojos para seres frágiles o más bien rotos.

my blue eye dijo...

Esa misma razón me lleva a ir a ver sus películas al cine. Tal vez el problema es que yo me impongo que me gusten, y al final no es así: siempre encuentro un punto forzado entre tanta poesía y tanta fragilidad.

Me quedo con "Magnolia", ¿la ha visto?

Lenny Zelig dijo...

No, pero creo que debiera.

Anónimo dijo...

Vuelva, Miguel, le echo de menos. Si usted no postea nuestra amistad de otoño no puede crecer, lo entiende, ¿verdad?.

PD1: "Magnolia" está genial en serio (al menos las 2horas y 20minutos que llevo vistos), pero de ella digo lo mismo que de "El Quijote": "lo bueno, si breve..."
PD2: ¡ya tengo en mi poder "Beautiful girls"!, la reservo para derretirme el finde, y va por ustedes. Un beso.